Prosigo al blanco

Filipenses 3:12-14

El apóstol Pablo nos relata la manera cómo debemos continuar la vida cristiana, nos detalla las cosas que debemos superar y mejorar. Este escrito de Pablo está inspirado en las competencias de los griegos de esos tiempos. El apóstol Pablo compara esas competencias deportivas con la vida cristiana.

A. v.12. “No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto”. Debo anhelar más de Dios: dones, mejoras personales, mejoras económicas, mejoras familiares. Prohibido estancarse en Cristo. 3 Juan 1:1. Hay un dicho que dice: “la satisfacción es la tumba del progreso”. Cuidado con esto, Dios tiene más para nosotros.

Aquí el concepto “perfecto” no se refiere a situaciones espirituales, y esto es muy interesante conocerlo, sino que Pablo se refiere a los corredores deportivos de ese tiempo. Ellos corrían en línea recta, ida y regreso, esa era la competencia. Después se dispuso la carrera en maratón y luego en círculos alrededor de un estadio, entonces los corredores corrían desnudos, y era una competencia sólo de hombres y sólo presenciada por hombres (“despojándose de todo peso”), y ellos decían: “mi cuerpo no es perfecto, pero puedo ganar”. No somos perfectos pero podemos alcanzar las metas y las bendiciones que Dios ha dispuesto para nosotros.

B. “Sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús”. Todo lo que Dios ha preparado para ti. Fuiste alcanzado por Dios para ser bendecido. Jeremías 29:11.

C. “Olvidando ciertamente lo que queda atrás”.  Esto Pablo lo dice por él mismo: Hechos 9:10-15. Que nuestros errores pasados no nos limiten lo que Dios quiere hacer con nosotros, con lo que Dios quiere bendecirme. Por eso es que tenemos nueva vida en Cristo. Pablo mismo se avergüenza de su pasado como perseguidor de la Iglesia. 1 Timoteo1:12-13.

D. “Extendiéndome a lo que está adelante”. Que los conflictos del presente tampoco te detengan. (Tomar decisiones que me hagan tener paz en la tormenta). En el momento en que Pablo escribe esta carta, estaba preso, pero debemos aprender que si seguimos avanzando, nada podrá detener los planes de Dios para nosotros.

E. “prosigo a la meta…”. Que las dudas del futuro tampoco te detengan, porque nuestro mejor futuro es estar bajo la sombra del Omnipotente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *